Tierra de oportunidades
¿Vieron que cada tanto, de relleno, los medios reflotan esas notas un tanto genéricas que incluyen un top 5 o 10 de películas de Hollywood que, vaya sorpresa, se filmaron en Argentina? Bueno, esto va a ser un poco eso pero nos vamos a encargar de su contracara: un intento de rescatar las expresiones que recorren los márgenes de este fenómeno.
Ya sea por la impunidad que suele ostentar el capital extranjero en nuestros pagos, por un tipo de cambio siempre conveniente o por la capacidad de hacer uso y explotación de una amplia variedad de paisajes con casi nulas regulaciones, esta noble tierra fue elegida por productores de toda estirpe para llevar a cabo proyectos de lo más inviables.
Como siempre, vamos a empezar por el principio; por el hecho originario que nos destinó ontológicamente a albergar este tipo de delirios fílmicos. A lo mejor escucharon hablar de esto, pero se dice por ahí que la primera película porno de la historia se filmó en suelo patrio * “Himno Nacional Argentino - Charly García” plays in the background *. Se trata de El Sartorio (1907), corto de cuatro minutos de duración que es considerado el primer registro audiovisual del mundo en mostrar genitalidad y sexo explícito. Claramente no está firmado por ningún director porque en esa época el porno no se firmaba y faltaban varios años para eso de la teoría de autor que hoy damos (a veces erradamente) por sentado. La cosa es que, por cuestiones coyunturales, se supone que la película fue filmada por mano francesa en una locación indeterminada que podría tratarse de las costas del Río Paraná, en Rosario, o la ribera de Quilmes. ¿De qué la va? Un fauno, unas ninfas en el río y ya se podrán imaginar el resto.
Por una cuestión de contigüidad temática me parece oportuno seguir con Snuff (1976) del matrimonio de productores exploitation Michael y Roberta Findlay, que saltaron a la fama (ponele) con esta película filmada en el delta del Tigre por el hecho de venderla como si el metraje incluyera la muerte real de una de las actrices. Esta eficaz estrategia de marketing estaba potenciada por el espectacular tagline (léase, “esa frase ganchera que va en los afiches”) que rezaba: “La película que sólo podía filmarse en Sudamérica… donde la vida es BARATA”. El morbo no sólo llevó gente a las salas sino que terminó por acuñar el término.
El snuff se volvió tan potente en el imaginario popular que fue abordado posteriormente en películas como Videodrome (1983) de David Cronenberg, donde las ondas televisivas empiezan a generar alteraciones en la carne humana, Tesis (1996) de Alejandro Amenábar, un muy lindo thriller psicológico sobre ciertas obsesiones académicas, o 8mm (1999) de Joel Schumacher, un delirio divertidísimo y moralista protagonizado por el querido Nic Cage. Ah, y me faltó contar algo importante: la protagonista de Snuff (supuesta víctima) era nada más ni nada menos que Mirta Massa, popular modelo y actriz argentina de la época; Massa, Tigre, ¿coincidencia?
Bueno, ya sé que ya sabés qué viene acá y es probable que en tu mente este newsletter esté timecodeado cual video de YouTube y que esta sea la parte que elijas saltearte, así que vamos al grano: Mate existe gracias a tus aportes y si te gustan nuestros contenidos te invitamos a asegurar que sigan existiendo en el futuro dejando unos morlacos, idealmente de forma recurrente, en somosmate.ar y así ser parte del cambio que querés ver en el mundo, ya que somos lo que hacemos para cambiar lo que etc 🪐
Y medio que es inevitable: todos los caminos llevan a Roger Corman. A esta altura creo que sólo lo hemos nombrado al pasar, así que vamos a hacer una breve presentación. Corman es —sí, al día de la fecha este hombre sigue vivo y trabajando— un director y productor cuyo legado va muchísimo más allá de su obra. Como director es reconocido (y hasta ostentaba cierto prestigio en un comienzo) por sus adaptaciones de Edgar Allan Poe, la mayoría protagonizadas por Vincent Price, entre las que se destacan The Pit and the Pendulum (1961) y The Raven (1963); ah, y también dirigió esa belleza sin pies ni cabeza que es The Trip (1967), una de las primeras películas que abordaba el uso del LSD, con guión de un jovencísimo Jack Nicholson.
Por si fuera poco, el tipo se volvió una pieza fundamental para propiciar la aparición del Nuevo Hollywood, al formar y darle la oportunidad de filmar sus primeras películas a talentos como Francis Ford Coppola, Joe Dante, Martin Scorsese, James Cameron y Peter Bogdanovich, entre otros. Su escuela era simple: películas baratas, efectivas, vendedoras, y bueno, con un poco de explotación aquí y allá.
Para los ochenta, Corman se había transformado en un exitoso director de explotación y en un maestro de los mockbusters, películas diseñadas para explotar el éxito (y las campañas publicitarias, más que nada) de otras grandes producciones del momento. Así es como Corman llega a la Argentina para, en coproducción con los estudios Aries de Héctor Olivera y Fernando Ayala, realizar una serie de mockbusters pensados a partir del éxito de Conan the Barbarian (1982) que incluyen Deathstalker (1983), The Warrior and the Sorceress (1984) —protagonizada por el David Carradine de Kung Fu— y Wizards of the Lost Kingdom (1985).
En esta última película, Héctor Olivera tuvo la oportunidad de tomar el mando luego de que Corman se peleara con el director importado de turno, y esto llevó a que juntos desarrollaran el proyecto de Cocaine Wars (1985), magnífica película de la que ya hemos hablado en una edición anterior de esta noble publicación, y que estuvo a punto de llevar el título de The Bolivian Connection, con el objetivo de explotar la popularidad de The French Connection (1971) y su secuela. Ah, datazo, poco después Olivera dirigió otras dos películas producidas por Corman con guión de nada más ni nada menos que José Pablo Feinmann: Two to Tango (1989) y Play Murder for Me (1990). Si a alguien le interesa profundizar en este particular universo, recomiendo fervientemente el libro Hollywood en Don Torcuato (2020) de Andrés Fevrier.
Otra alucinatoria aventura que no podemos dejar pasar es Eterna sonrisa de Nueva Jersey—o Eversmile, New Jersey— (1989) de Carlos Sorín, que años después sería recordado por Historias mínimas (2002) y no por mucho más. Esta coproducción argentino-británica está protagonizada por el siempre grandilocuente Daniel Day-Lewis, la actriz serbia Mirjana Joković y algunos talentos locales como Julio de Grazia y Boy Olmi. La película narra la vida de un médico rural irlandés radicado en la Patagonia que, de forma altruista, atiende a cualquiera que requiera de sus servicios. En una de esas el médico se enamora de una mujer y juntos se van de viaje por las rutas argentinas * classic Spinetta rock’n’roll plays in the background * para compartir secuencias surrealistas sin mucho asidero y que por alguna razón llevan al médico a cuestionarse su altruismo. ¿Cómo terminó esto? Basta con decir que el resultado le dio tanta vergüenza a su director que impidió su estreno local.
Para ir cerrando, voy a mencionar un par de ejemplos un poco más canónicos pero que me parecen realmente fantásticos, como Screams of Stone (1991) de Werner Herzog, película que narra una expedición de ascenso al Cerro Torre en cuyo rodaje el director casi pierde una mano —y se dice que un paisano se la tuvo que orinar para que no se terminara de congelar— o Happy Together (1997) de Wong Kar-wai, que aborda el (des)amor entre dos hombres hongkoneses que se encuentran en busca de una nueva vida en Argentina y posta que la forma en que Wong filma San Telmo es de una belleza indescriptible. Esta aventura eventualmente nos regaló esa foto hermosa en donde se lo puede ver dirigiendo mientras viste una campera de Independiente, durante el rodaje de In the Mood for Love (2000).
Ah, y nobleza obliga: mientras escribía esto me enteré de que existe un libro de Diego Curubeto titulado Babilonia Gaucha (1993) que profundiza en este tema en particular. Ya me hice de un ejemplar porque en las tierras de Galperín está disponible (usado) a precios estúpidamente baratos —tiro el dato, de paso—, así que cuando lo lea les cuento.
Sin más, este caprichoso listado ha llegado a su fin. Si les parece que me estoy olvidando de algún ejemplo importante chiflenmen y hacemos #Parte2.
Que lo disfruten ✨
Artista invitadx
Os presento a Emily And, proyecto de Emily Ann McKelvey que describe como “yo y un conjunto de alter egos”. La estadounidense radicada en Argentina desde 2017, que algunxs llaman “la yanqui más querida del pueblo argentino”, es autora de más de 300 canciones bilingües y ha tocado cientos de fechas solistas en el under bonaerense así como en Rosario, Córdoba, La Plata, Neuquén y Necochea. A fines del 2021 lanzó su 6to LP y primero dentro del género pop: Spilling the Porotos, que contiene 11 canciones escritas en 2018 y que se destaca tanto por sus melodías pegadizas como la extravagante sinceridad de su contenido lírico.
Tras presentar el disco en un concierto agotado en La Tangente en el mes de abril, en su primera fecha con banda completa (Tomás Stagnaro, Gona Sia Ripoll, Enrico Ariel Russo, Matías Figueredo, Lola Grosz y Julián Alejo Sosa) producida en colaboración con la productora feminista Pulpa Riot, Emily And llevó el proyecto de gira por el conurbano, con fechas autogestionadas en Florencio Varela, San Miguel, Morón e Isidro Casanova y una despedida en CC Matienzo. Hace unos días se despidió de sus redes sociales, anunciando que tomará un descanso de manejar estos medios mientras se ocupa de trazar, financiar y gestionar los próximos pasos del proyecto, que se anunciarán a partir de agosto 2022.
Agenda
3/6 - 21hs: Tomás Pez + Vicki Zuin (Música)
@ Teatro el Taller Centro Cultural (Granaderos 1964, Mendoza). Entrada: $7503/6 - 21hs: Furia y miel -Tablao Flamenco- (Música y danza)
@ Fundación La Hendija (Gualeguaychú 171, Paraná, Entre Ríos). Entrada: $900.3/6 - 21hs: Loli Molina + Sofía Di Marco + Pame Guzmán (Música)
@ Comuna Club (Colón Extremo Sur, entre Ruta 3 y Ruta 146, San Luis). Entrada: $1000.4/6 - 17hs: Filmoteca en vivo presenta Rescate de sangre (1952) de Francisco Mugica (Cine)
@ CCK (Sarmiento 151, CABA). Entrada: Gratuita.4/6 - 21hs: Perdonen la tristeza (Teatro)
@ Teatro del Hain (12 de Octubre 1013, Ushuaia, Tierra del Fuego). Entrada: $1000.5/6 - 15 y 18hs: Ciclo “Mae West, sex symbol” presenta Klondike Annie (1936) de Raoul Walsh (Cine)
@ Sala Leopoldo Lugones (Av. Corrientes 1530, CABA). Entrada: $350.
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Por las dudas, vamos con un poco de data que nunca está de más aclarar:
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Santiago 👽
Santiago Martínez Cartier nació en Buenos Aires en 1992. Se define como escritor de ciencia ficción. Lleva seis novelas publicadas desde el 2014 hasta la actualidad. Colaboró como redactor en diversos sitios especializados en cine y literatura, como Hacerse la crítica, House Cinema y El Teatro de las Voces Imaginarias, entre otros. Produjo el audiolibro El quinto peronismo en formato radioteatro, adaptación de su novela homónima. Organizó eventos culturales y programó y presentó ciclos de cine. Supo tocar la batería y componer junto a las bandas Efecto Amalia y Gente conversando. Actualmente forma parte de la banda de Ire Paz. Palermo Dead (2021), una sucesión de relatos de terror que transcurren en un edificio maldito construido sobre el Cementerio de la Chacarita, es su último libro.